Un estudio realizado por la Universidad de Córdoba sobre el impacto socioeconómico de los incendios en zonas de caza revela que la provincia de Huelva perdería hasta 45 millones de euros en el caso de que un fuego arrasara las zonas destinadas a esta actividad.
Ésta es una de las conclusiones del trabajo de investigación elaborado por un grupo de ingenieros de montes, que han aplicado una metodología única que permite medir el impacto socioeconómico de los incendios forestales sobre los recursos de caza. Para este análisis, han empleado sistemas de información geográficos (SIG) que simplifican los métodos que los gestores forestales emplean en la actualidad y permiten su extrapolación a otros territorios arbolados y cultivos agrícolas.
En concreto, se ha aplicado este modelo a las provincias de Huelva, Madrid y la región de Aragón y se está tratando de trasladar a la realidad forestal chilena a través de un proyecto de la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo, dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores.
La idea es transformar en parámetros mensurables valores intangibles para ofrecer un modelo destinado a la toma de decisiones de las administraciones encargadas de gestionar el fuego. El proyecto, denominado Firemap, se enmarca dentro de una investigación multirregional enfocada a desarrollar un índice coordinado de riesgo de incendios utilizando sistemas geográficos.
El coordinador de este estudio, Ricardo Zamora, explica que, desde un punto vista práctico: "El objetivo era determinar qué territorios tenían mayor valor cinegético para, de este modo, invertir el dinero en labores preventivas de forma más eficiente". Así, analizaron los recursos naturales de determinadas áreas con el fin de priorizar la inversión en aquellas zonas que tienen mayor valor ecológico o que tienen más dificultad para extinguirlos.
Para ello, han sido pioneros en la aplicación de técnicas de valoración de recursos que no tienen transacción mercantil, según cuenta el profesor de la UCO, Ricardo Zamora. "Hemos hecho un esfuerzo por desarrollar algoritmos que pudieran valorar recursos que cada día cobraban más importancia y que estaban en la línea de lo intangible", como el ocio o el paisaje, entre otros.
Dividieron el territorio en cuadrantes y asignaron a cada unidad territorial una riqueza cinegética basada en la densidad de fauna de caza en un determinado ecosistema, y a eso le asignaron un valor de mercado. Además, añadieron el correspondiente stock reproductivo (proporción de animales de que no deben cazarse para asegurar futuros nacimientos), e integraron todo en una fórmula derivada de la economía de recursos naturales. Finalmente, incorporaron a su análisis índices que estiman la dificultad de extinción y el valor ecológico del territorio.
El sistema empleado recibe el nombre de Cartofire (http://www.geogra.uah.es/cartofire/), un modelo cartográfico a través de Internet que, utilizando la tecnología Web Mapping, permite el intercambio de información geográfica y servicios de geoproceso, esto es, que permiten introducir cambios y variables de proyección geográfica de manera remota, explica Juan Ramón Molina, encargado de la parte técnico-informática dentro del proyecto.
Junto a los métodos más tradicionales de análisis espacial (estadísticos y de muestreo de campo) estos expertos proponen el uso de nuevas tecnologías, como la Teledetección y los Sistemas de Información Geográfica, explica Molina. Igualmente, estos sistemas apuntan al desarrollo de nuevos métodos de análisis para obtener las variables básicas del riesgo e integrarlas en modelos informatizados que permitan una labor preventiva efectiva de las áreas más vulnerables.
El proyecto ayudará a prevenir por los problemas ocasionados por el fuego, un fenómeno que devora miles de hectáreas cada año en España.
En a año el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino. Estas cifras han supuesto unas pérdidas de más de 20 millones de euros. Por este motivo, un grupo de instituciones españolas, dirigidas por la Universidad de Alcalá de Henares han emprendido este proyecto para atajar el problema de los incendios forestales desde la prevención.
La UCO se embarcó en esta iniciativa para "determinar el impacto socioeconómico de distintas variables que, hasta el momento, no se habían analizado de forma conjunta, como la madera, las dehesas, el paisaje o los recursos de caza, entre otros", según explica el coordinador del proyecto y subdirector de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos y Montes, Francisco Rodríguez Silva.
(De Innova Press)